La Semántica y el Ornitorrinco

Lo más probable es que ustedes hayan escuchado esta palabra (semántica) anteriormente.  A veces dicha por los peritos de la lengua en alguna ocasión apropiada, pero la mayoría de las veces es dictada por un bárbaro de la lengua, una especie de animal filosofunculista de regresión mental y poseedor de una carie alfabética horrorosa, el que ha memorizado ciegamente esta honrosa palabra sin saber lo que verdaderamente confina en su significado filológico; y la repite sin pensar tal como se repite el hipo.

Pero, ¿qué es la semántica?  Estoy convencido de que usted lo sabe, pero para beneficio de aquellos que aún están sondeando los límites del aforo significativo de esta nomenclatura lexical Castellana, les ofrezco la siguiente grácil definición. 

La Semántica (proveniente del Griego antiguo: σημαντικός, cuya transliteración académica es: sēmantikós; lo que significa: importante) es la astuta rama de la lingüística y la lógica la que estudia y se preocupa cariñosamente del significado exacto de las palabras.  Hay una serie de ramas y subramas en el frondoso y coqueto árbol de la semántica, y éstas abarcan: la Semántica Formal, que estudia los aspectos lógicos de significado como el sentido, la referencia, la implicación, y la forma lógica; la Semántica Léxica, que estudia el significado y las relaciones e interrelaciones de las palabras; y la Semántica Conceptual, que es la que estudia la estructura cognitiva del significado.  Entonces la Semántica es descriptiva y nó prescriptiva.

Como apéndice a estas ramas, está la Semántica Denotativa de un lenguage, cuyo propósito es el asignar un valor preciso  y puntual a cada expresión en el lenguage.  También están en esta pandilla terminologista la Semántica de Intercalación, la Semántica Teorética, la Semántica de Lógica Modal, la Semántica Léxica, y la Semántica Axiomática para nombrar algunas otras.  Empero, en este artículo solo hablaré (escribiré para estar semánticamente correcto) de Semántica en general, porque de este modo; no me envolveré en "Obscurum Verborum Provinciae Populi" que en Castellano significa Semántica Obscura Popular.

Entonces, la palabra "semántica" en sí denota una variedad de ideas, desde lo vulgar a lo popular, y desde lo indocto a lo experto para lo cual usamos herramientas que incluyen  lexicología, sintaxis, pragmática, etimología, chuchadas surtidas y otras menudencias de la lengua, independientemente si la suya tiene pelos, o es larga.

Esto no representa o encarna que el significado de las palabras del lenguage como lo conocemos sea prepsicológicamente metafórico en su nivel, o que el lenguaje semántico es analógico o literal.  Al llegar a este punto me he dado cuenta que probablemente la mayoría de mis lectores están más perdidos que una gaviota en Bolivia, o que Bernardo O'Higgins en la Guerra de las Galaxias; así que he decidido cambiar el rubro del caló, y un poco más adelante me dedicaré a enhebrar un concepto diferente en una forma más liviana y asequible al humor y al entretenimiento, y no estrictamente pegado a la locutecnia; así que hablaré del Ornitorrinco, conocido en los países de habla Sajona, Anglosajona, Saxosajona,  Frisiasajona y Jutesajona como Platypus.

Semántica y Pragmática

Ya hablamos de Semántica.  La Pragmática es otra rama de la lingüística que se preocupa del uso de la lengua en contextos sociales, y las formas en que las personas producen y comprenden significados a través del lenguaje que usan en sus círculos sociales.  La Pragmática es un término que fué acuñado en 1930 por el filósofo C.W. Morris, y que después fué desarrollada como un sub-campo de la lingüística en los años 70.

Ejemplos de Semántica y Pragmática:

Semántica:      Lo que dices constituye un palmario matalotaje de bahorrina.
Pragmática:    Hablas pura mierda.

Semántica:      La encantadora de la taberna era de un carácter innoble.
Pragmática:    La bruja del bar era más fea que la cresta.

Semántica:      Individuo adiposo de temple posma.
Pragmática:    Guatón culiao.

El Ornitorrinco

Si hubiese un Premio Nóbel para el animal más extraño, infrecuente e inverosímil que camina sobre la faz de la tierra, ése premio sería sin duda alguna para el Ornitorrinco.  Este magnífico y rarísimo semiacuático mamal es endémico en los ríos de Australia levantina, y parece que hubiese sido hecho por el padre del Prometeo Moderno mejor conocido por todos como: Frankenstein, un entrañable producto de la carnicería del Doctor Víctor Frankenstein y su asiduosidad al Galvanismo.  La diferencia entre el Ornitorrinco y Frankenstein es que el Ornitorrinco es lindo y amoroso, y Frankenstein se parece a su suegra.  La otra diferencia es que el Ornitorrinco no usa una escoba para movilizarse.

Realmente este   animal parece que hubiese sido fabricado con los restos que sobraron de otros animales: tiene el pico de un pato gigantesco, el cuerpo de una nutria, la cola de un castor, patas palmeadas de sapo, piel de oso, y unas teticas de gato.  Obviamente este Ornithorhynchus Anatinus supo muy bien de cómo aperarse para su largo viaje desde el Mioceno hasta hoy, y sobrevivir.

Según una antigua leyenda Aborígen, el primer Ornitorrinco nació después de que una joven y atractiva pata se cruzó con una fea y solitaria rata acuática, pero que era más persuasiva que vello androgénico de mujer.  La pata debe de haber sido ciega, pero la leyenda no habla para nada de esto, y tampoco menciona nada acerca del proceso de  cortejo que tomó lugar antes de la extraña cruza.  Pero las cruzas extrañas no son tan extrañas después de todo.  De acuerdo a la Enciclopedia de Abraham Lillo Machuca, personaje cariñosa e indeleblemente conocido en Chile como El Tony Caluga, hay cruzas extrañas como por ejemplo:

-        Un elástico y un elefante: Un Elastifante.
-        Una culebra y un puercoespín: un metro de alambre púa.
-        Un canario y un gorila: nada, ¡pero viera usted cómo grita ese pobre pajarito!

En 1819, los barcos mercantes que circulaban los nuevos mares descubiertos en el planeta, acarreaban un surtido de animales australianos a Europa para distribuírlos en los jardines zoológicos y museos de Inglaterra, estaban atiborrados de canguros, cisnes negros, koalas, avestruces, demonios de Tasmania, osos hormigueros, y un surtido grande de mamales, marsupiales, reptiles, aves, monotrematas, y hasta animales marinos, sin contar a los marineros; eso es.  Entre la carga, llevaban un Ornitorrinco relleno, producto de la cruda Taxidermia de la época.  Como se puede observar, el Arca de Noé no era ni única ni señera.

Este seco y impávido Ornitorrinco fué el primero que llegó a Europa, y la caterva popular estaba convencida de que era una falsificación hecha por los marineros para ganar dinero.  Basados en esta reacción del público, otros marineros comenzaron a engranar y pegar partes de animales diferentes para pasarlos como algún tipo de bestia diferente que venía del Commonwealth de Australia, y por ende, terminaron creando una nutrida y profusa bestiateca de animales rarísimos, todos más falsos que las especies humonculi(1)

(1) Homunculus (Latín), significa hombre muy pequeño, tan pequeño como el hoyo del culo según lo sugiere esta atinada y respetable palabra Latina.  El plural de esta palabra es: humonculi.  Entre los más destacados humonculi del planeta, claramente se distinguen y destacan los siguientes neotenios: los abogados valetudinarios y ladrones, los políticos nanocefálicos apestosos, y los numerosos sanguisugentes sacerdotes de incestuosidad mental, moral y espiritual.

Para agregarle a la extraña naturaleza de este magnífico animal, está el singular hecho de que se reproducen por huevos como los pájaros, ¡pero las criaturas recién nacidas amamantan!  ¡Esto es muy circumbirúndico!  Ahora sabemos que aparte de algunos especímenes llamados "echidnas" -que son unos ositos hormigueros de lo más bonitos y amorosos-, el Ornitorrinco es el único animal entre las 4.237 diferentes especies en existencia hoy que ponen huevos.  Otra rareza de esta animal es que el macho de la especie tiene un arma secreta en las patas traseras con las que les inyecta veneno a sus enemigos apuñalándolos con ellas.  El Ornitorrinco usa estos "puñales" de la misma forma en que los abogados deshonestos y los políticos mugrientos lo hacen: a mansalva y por la espalda.  ¿Qué cosas, no?  

Nota: la acreditada definición universal de candidato político es: una alimaña social inescrupulosa que con el dinero que obtiene de los ricos, consigue los votos de los pobres, bajo la promesa de discriminar a estos últimos, y  protegerlos a los unos de los otros.

El Ornitorrinco es una especie de Ingeniero también.  Esta habilidad por sí sola los pone por sobre los humonculi.  El Ornitorrinco construye complicadas madrigueras para vivir, las que forman una intrincada red de túneles en los bancos de ríos y lagos, y los pasadizos que cava los taladra en una pendiente ascendente hacia la cámara que le sirve de espacio para vivir, la que está ubicada en el extremo más alejado de la entrada del túnel.  Esto hace que el dormitorio del Ornitorrinco esté sobre el nivel del agua y protegido de inundaciones.

La maravilla no termina aquí.  Estos animalitos pueden nadar rápidamente bajo el agua porque tienen patas como aletas, las que se extienden mas allá de la punta de sus dedos y garras, pero lo que les hace tremendamente incómodo para caminar en tierra.  Si usted usa aletas para nadar (curiosamente nosotros llamábamos a estos aparatitos "güaletas"), sabrá lo incómodo y difícil que es caminar con ellas en la arena, pero resolvemos este problema quitándonoslas (¿se acordaba de esta última palabrita?).  Bueno, el Ornitorrinco para caminar sobre la tierra las dobla bajo sus poderosas garras, las que ahora están habilitadas para cavar su madriguera.

Durante la época de apareamiento (o celo) resulta que los machos y las hembras duermen en lugares separados.  Los machos se quedan es sus dormitorios de costumbre, pero las esposas construyen habitaciones separadas con la excusa de la anidación.  ¿No será en realidad que tienen algo parecido a la "jaqueca" que nuestras pobres esposas sufren tan a menudo, de esas que a veces duran años?  ... pero en realidad amigos míos, ¿quién entiende a las mujeres?  A las mujeres hay que amarlas, no entenderlas.  Si usted asimila este astuto y práctico principio, probablemente usted tendrá un matrimonio más feliz, mucho menos complicado; y quizá hasta más barato.

De vuelta al Ornitorrinco femenino, u "Ornitorrinca".  Antes de poner sus huevos, la Orni construye en sus nuevas habitaciones un nido con hojas mojadas, las que acarrea por los corredores de su nueva morada, desde el exterior hasta su nueva y temporalmente célibe recámara, transportándolas encima de su cola y no las acarrea ni con las patas ni con el pico.  Este húmedo nido preverá que los huevos se sequen.  Nosotros sabemos concienzuda y dolorosamente el serio problema que significa tener los huevos secos. 

Después que la Orni aova (deposita sus huevos, o huevea), hace algo simplemente extraordinario.  Comenzando desde la entrada del pasaje y hasta llegar al nido en su recámara, va avanzando de a poco y haciendo paradas de cuando en cuando.  En cada parada construye una muralla de tierra detrás de ella aplanándola firmemente con su cola.  Estas barreras son de unos 15 a 16 centímetros de grosor y sellan completamente el pasaje de entrada a la madriguera por detrás de ella.  Esto lo hace varias veces de modo que hay varias murallas obstructoras a lo largo del pasillo de entrada, el que puede tener más de 30 metros de largo; y con esto la madriguera queda completamente sellada en tándem.  

Esto evita que cualquier depredador en busca de comida, o con ganas de hacerse una tortilla con caviar de Ornitorrinco pueda llegar a los huevos.  Siguiendo el característico olor a huevo, los depredadores comienzan a escarbar la madriguera en busca de su comida, pero se encuentran con un sello de tierra.  Sospechosos de esto, siguen cavando hasta que se encuentran con el segundo sello, y después con el tercero, y el cuarto... 

A esta altura, la bestia ya está muy adentrada en un obscuro y húmedo túnel que no sólo es atemorizante, pero en el que se ha desvanecido ya el olor de los huevos al éste mezclarse con los olores de la tierra disturbada, de la humedad, y de las raíces destruídas en el proceso.  A este punto –si nó antes- el animal normalmente recula y abandona su búsqueda, y los huevos de la Orni quedan sin ser descubiertos.  En esto, los Ornitorrincos se parecen mucho a los Argentinos: ambos odian que le rompan los huevos.

Estos huevos son muy raros también: normalmente en cada camada, la Orni pone dos o tres huevos blanditos, los que al contrario a los de las aves, no son huevos de una cáscara dura y resistente, sino que están resguardados con una flexible cubierta mucilaginosa parecida a la goma, al igual que los pintorescos huevos de reptil.  (Dato: Todos los humonculi son reptilianos, el parecido viene de los huevos).

Lo alucinante, sobrecogedor y circumbirúndico no termina aquí.  Los recién nacidos cuando salen del elástico y pegajoso huevo, son del tamaño de la uña del dedo medio de su pié izquierdo, afortunadamente sin padecer de pié de atleta; y son más frágiles que la conciencia social.  Anteriormente mencioné que los Ornitorrincos tenían una "teticas", pues bién, éstas no son mamas sino que simplemente "teticas", así que los pezones son nulos y menos prácticos que ventana de submarino; por lo tanto, la leche supura a través de los poros de la piel de la madre y no a través de pezones, y los pequeñines tienen que lamerla de la piel de su madre para poder alimentarse.  Esta es una forma muy primitiva de alimentación, pero el Ornitorrinco es un animal primitivo como el embrionario respeto que los humonculi tienen por el resto de nosotros, y después de unas 16 semanas de chupar como locos, los Ornitorrinquitos están listos para su primera excursión en el agua.  ¿Qué cosas, no?

Ahora iba a contarles sobre el por qué las hembras del canguro tienen tres vaginas, y a relatarles una historia sobre quién inventó la sonrisa; pero me arrepentí.  Otra cosa, la Semántica y el Ornitorrinco no tienen absolutamente nada que ver el uno con el otro como quizá lo pudiese insinuar el título de este inconexo y baladí edicto.  Esto es solamente otro peo de mi mente pero con su correspondiente Habeas Corpus; pero ¿a quién realmente le importa?, o semánticamente hablando: ¿quién se incumbe con futilidades gurruminas?  He dicho.



El Loco