La Meseta de Nazca

Siempre he creído en extraterrestres a los que desde niño, solía llamarles arbitrariamente: “marcianos”.  No sé de donde carajos salió este apodo para los habitantes de las otras galaxias.  ¿Quizá porque en ese tiempo Marte estaba de moda?  ¿O porque el gil al que se le ocurrió llamarles así no tenía imaginación alguna?  El caso es que en ese entonces, absolutamente todos los extraterrestres del Universo eran Marcianos.  ¿Qué cosas, no?

Tal vez puede ser que yo sea uno de ellos aunque yo no lo sepa.  Digo esto porque hay muy pocos humanos tan locos, insanos y desquiciados al nivel mío en este torcido planeta.  Secretamente me gustaría ser un “marciano”, un extraterrestre que ha venido desde más allá del infinito.  También existe la posibilidad de que esta sociedad extraterrestre se haya aburrido de mi locura, y me haya desterrado a este horrible peñasco húmedo lleno de gente rara para enseñarme una lección.

En fin, como sea que sea, estoy aquí y por esas razones un día me decidí a visitar los dibujos de Nazca, pensando que quizá en el lugar donde se encuentran estos grandiosos trazados, sea un pizarrón interestelar de recados, y a lo mejor pudiese haber un mensaje para mí... 
Mis memorias de este viaje a Nazca son antiguas como la sideral edad que llevo dentro. 

Las de otra forma llamadas Líneas de Nazca son una serie de inmensos y pretéritos geoglifos* en el desierto de Nazca, en el sur del alto Perú.  Las figuras más grandes miden hasta 370 metros de largo.  Este lugar y sus marcas fueron designados como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1994.  Aunque algunos de los geoglifos de Nazcas se asemejan a los motivos de Paracas(1), los estudiosos creen que las Líneas de Nazca fueron creadas por la cultura Nazca entre 500 AEC y 500 EC.  La denominación de estas líneas varía en número y complejidad.  Cientos son líneas simples y formas geométricas; y hay más de 70 son diseños zoomorfos de animales, como pájaros, peces, llamas, jaguares, monos o figuras humanas.  Otros diseños incluyen formas fitomorfas*, como árboles y flores.

(1) La cultura Paracas fué una sociedad andina que existió entre aproximadamente el año 800 AEC y 100 AEC, quienes tenían  un amplio conocimiento sobre irrigación e hidromecánica, y quienes contribuyeron significativamente a las artes textiles.

Estos originales diseños son líneas superficiales bordadas en el suelo por la eliminación de los guijarros rojizos que cubren el suelo, que dejan al descubierto el suelo blanquecino-grisáceo que yace debajo.  Los eruditos difieren en la interpretación del propósito de los diseños, pero, en general, les atribuyen un significado místico.

Debido a su aislamiento y al clima seco y -aunque ventoso- estable de la meseta, las líneas se han conservado en su mayoría de forma natural.  Los cambios extremadamente raros en el clima han alterado ligeramente los diseños.  A partir del año 2012, los expertos creen que las líneas se han menoscabado debido a la afluencia de ocupantes ilegales que han buscado habitación en estas tierras.

Contrariamente a la creencia popular de que las líneas y las figuras sólo pueden ser vistas desde un avión, éstas son también visibles desde estribaciones circundantes y otros lugares elevados.

La Jornada

La altura de estas ásperas montañas nos estaba causando estragos a mi guía y a mí, pero estábamos a una baja altura aún y esto no debería estar ocurriéndonos a esta elevación.  Resoplábamos como el caballo viejo de la sabana y nuestras mochilas parecían pesar una tonelada.  En nuestro paso por Arequipa a 2.350 m.s.n.m. una semana antes, no me sentía tan apremiado como me sentía ahora. 

Debo decir que mi guía no era peruano, sino que era alguien que andaba de turista y que ya había visitado Nazca anteriormente, y quien se ofreció gentilmente para servirme de guía en mi primera experiencia en Nazca.  Debo agregar que este guía era una hermosa, joven, y curvilínea ciudadana Noruega que conocí durante uno de esos fortuitos desayunos en el hotelillo donde me alojaba en Puerto de Lomas.  Desde este punto es desde donde nos encaminaríamos a Nazca por la Ruta 1 Sur.

Nota:
Se denomina altitud a la distancia vertical que existe entre cualquier punto de la Tierra seca en relación al nivel del mar.  Para calcular la altitud, se toma como referencia el nivel del mar, y es por ello que la altitud se expresa en metros seguida del símbolo "msnm", que significa "metros sobre el nivel del mar"; también se utiliza la cantidad en metros seguida del símbolo m, y de la abreviatura s. n. m., es decir,  m. s. n. m. (“metros sobre el nivel del mar”), pero usted ya sabía esto. ​

En el Perú a unos 450 kilómetros al sur de la Ciudad de Lima y cerca del océano Pacífico, se hallan las pampas llamadas Ingenio, Nazca, Palpa, y Socos.  Entre Palpa y Nazca, en la pampa de Socos se encuentran estas formidables, antiguas e insólitas líneas esbozadas en el suelo.  El grosor de estas líneas fluctúa entre los 40 y los 210 centímetros dependiendo del dibujo.  La composición del suelo es una especie de tierra negro-rojiza la que adquiere un color violáceo al anochecer, quizá producto de la luz selenita.  En estas altas comarcas se encuentran miles de líneas las que llegan a encubrir 520 km², pero la longitud de algunos de estos dibujos puede llegar a cubrir un área de hasta 800 km².

Nota del Autor:     

Por favor no se enoje si he profanado el mapa peruano con mi escueto conocimiento y mi frágil memoria porque por esto, recibiré mi castigo cuando me vaya al Horno a juntarme con Pachakutiq Inka Yupanki.  En mi defensa puedo decir que el conquistador español; dentro de la infinita ignorancia contenida en su complejo mesiánico, descuartizó irresponsable y salvajemente un Imperio que cubría más de 2,000,000 de kilómetros cuadrados (siendo el Imperio precolombino más grande del planeta); con una población de más de 10,000,000 de habitantes a la llegada del invasor, y con más de 30 lenguajes diferentes.  El Imperio Inca (Quechua: Tawantinsuyu) fué el último capítulo de miles de años de civilización andina.  La civilización andina fué una de las cinco civilizaciones en el planeta a la que los eruditos consideraron: "prístinas", lo que quiere decir que son indígenas puras, y no derivadas de otras civilizaciones.  Tawantinsuyu incorporaba una gran porción del oeste de América del Sur centrada en las cordilleras andinas, regiones que incluyen además del Perú; grandes partes del Ecuador moderno, el centro y oeste de Bolivia, el noroeste de Argentina, el norte y centro-norte de Chile, y el sur de Colombia en un estado comparable a los imperios históricos de Eurasia.

Un par de semanas antes de aventurarme a tratar de descubrir esos antiguos secretos que los fitomórficos geoglifos del desierto de Nazca oculta celosamente a la vista, me encontraba en Lampa, la capital de la provincia de Lampa en la región de Puno, y está situada en las cercanías del lago Pukaqucha (aunque éste no es Pocacosa).  Esta ruta no es la ruta turística típica para visitar Nazca, pero fué el acuerdo a que llegué con mi guía la que estaba empeñada en conocer el Perú por otras rutas.  La guía era tan linda que mi fogosa naturaleza no pudo resistir el seguirla por donde quiera que ella quisiese ir.  Pernoctamos en Lampa por un par de noches, desafortunadamente en cuartos separados...

La realidad

Desafortunadamente la mayoría de nosotros pensamos con el pene.  La ingrata naturaleza nos dá muy poca sangre, la cual la utiliza o el cerebro, o el pene.  No tenemos suficiente sangre para usar ambos miembros al unísono.  A medida que maduramos, la sangre comienza a emigrar hacia el cerebro lentamente, pero hasta el momento de nuestra muerte, todavía no llega suficiente sangre al cerebro para que este pueda tomar decisiones maduras o correctas.   Probablemente un producto del Nucleus Accumbens Septi.

En Ruta Otra Vez

Dos días más tarde nos encaminamos en un destartalado y crujiente bus hacia las cercanías de Nazca.  Los dos días anteriores mi guía se los pasó sacando fotos y tomando anotaciones.  De lo único que me acuerdo en Lampa es de sus esbeltas piernas mientras me acordaba melancólicamente de la Juana...  Después de nuestra parada en  Lampa nos fuímos a Puquío y nos acuartelamos en este pueblito olvidado por la distancia, las memorias y el tiempo.  Más fotos... más anotaciones... más piernas.  Para mí, lo único digno de observar en estos remotos y desolados lugares, ere mi guapa y aventurera guía. 

De acuerdo a mi soberbia guía, ya estábamos cerca del propósito de nuestra jornada hacia Nazca.  Puquío está a unos 75 kilómetros mas o menos de Nazca, después de seguir una interminable cadena de pueblillos y caseríos sembrados desparramadamente en estas áridas e imperdonables alturas donde cuesta tanto respirar.  La jornada hacia la legendaria Nazca desde Puquío nos tomó casi cuatro largos y agotadores días, y fué una dolorosa sucesión dosificada entre desvencijadas camionetas, incómodos burros, agotadoras caminatas y noches de carpa.  El viento siempre nos acompañaba doquiera que estábamos o íbamos.      

Finalmente arribamos a Nazca.  Los callos de mis pies tenían callos con callos.  La cara y la parte descubierta de mis brazos estaban lustrosamente bronceadas por el Inca sol.  Las mochilas estaban más livianas por la reducción de alimentos y agua, nuestro ropaje se veía sucio y polvoriento, pero nuestras caras esbozaban amplias sonrisas, y nuestros espíritus estaban en un apogeo de paroxismo*.  Mi guía dijo que estaríamos solamente dos días en Nazca, y que regresaríamos a la civilización vía Lima, donde nuestra aventurera y exploradora asociación terminaría, y desde donde nos separaríamos en las diferentes direcciones de nuestras tan discordantes vidas (suspiro...).

Más suspiros...

Las Líneas de Nazca

Es muy difícil explicar en forma consciente los sentimientos y las profundas emociones que genera el observar algo tan inexplicable y grandioso como los dibujos de Nazca, grabados desde la eternidad en la desolada y hermosa extensión del Desierto de Sechura en Perú, esgrimiendo su notable fisonomía, sus desconcertantes secretos y sus arcanos misterios en sus inmemoriales (y quizá “marcianas”) delineaciones.

La ciudad de Nazca es la ciudad más grande en la provincia de Nazca, o por lo menos lo era en aquel tiempo en el que mis incansables plantas esculpían sus jóvenes huellas en la alta y ennoblecida silla de esta antigua civilización Andina.

La cultura Nazca, claramente influenciada por la cultura Paracas, era notable por sus textiles enormemente complejos y por diferentes y diversas artesanías y tecnologías en cerámica, textiles y geoglifos.  Esta perspicaz y clarividente cultura además construyó un extraordinario, portentoso y práctico ingenio de acueductos subterráneos, conocidos como “puquíos” porque se originaron en la región de Puquío; los que todavía prestan activa  funcionalidad.  A mi parecer, este complejo de acueductos fué superior en su ingeniería comparado al que diseñaron los Romanos, quienes los comenzaron a construír apenas unos años antes de la invención del flaco INRI.

Como siempre ha estado arraigado en mi salvaje naturaleza, yo quería “caminar” estos ancianos dibujos y “tocar y palpar” sus esplendidos antropomórficos delineamientos, tal como toqué esas magníficas ballenas anteriormente en otro día de mi juventud extendida; porque la enseñanza por tacto no se puede reemplazar con nada. 

El gélido viento andino cepilla constantemente la superficie de Nazca con implacable fiereza desde que se inventó el viento, mientras que el sol la cocina inmisericordiosamente.  Por las noches son visitados por las distantes y silenciosas luces celestiales emperifolladas de selenitas fosforescencias, y las intricadas figuras de Nazca parecen temblar bajo sus parpadeantes luces.  Este es un místico y extático lugar el que le dá nacimiento a profundos e insondables pensamientos.  La absorta contemplación y descubrimiento de estas fitomórficas y fantásticas figuras hendidas ligeramente en el duro terreno, me hicieron olvidar las piernas de mi guía, y a la inextinguible Juana.

Estas rupestres y gerontogéneas* expresiones gráficas fueron creadas por la gente del pueblo Nazca, y nadie tiene una idea verosímil o factible del por qué se concibieron estos prehistóricos geoglifos.  Algunos escolares piensan que estas figuras eran una relación con la astronomía; o que eran un símbolo para vincularse con sus divinidades.  Esto es porque el hombre es un animal religioso el que desde los primeros albores de su inconsciente conciencia ha adorado, reverenciado y venerado nada más que COSAS como símbolo de lo invisible, de lo omnipresente, de lo indescriptible, de lo inexplicable, de lo improbable; acerca de lo cual no ha podido descubrir o aprender prácticamente nada, y estas doctrinas son proclamadas por aquellos inertes mentales que prometen purificación a partir del error.

Estas costumbres y malos hábitos son el estándar de los Misterios Paganos.  Los primeros cristianos quienes se reunían en las cloacas bajo la ciudad de Roma, usaron los templos subterráneos de Mitra como sus lugares para rendir culto.  En el culto de Mitra se ha basado y adoptado gran parte del sacerdotalismo de la iglesia moderna.

Lo único cierto y palpable es el sentarse en medio de estas figuras de Nazca y observar la grandiosidad del universo que las ilumina.  El silencio aquí tiene resonantes ecos de eufonía y sabor, de tacto y consciencia, y de reticencia y sosiego.  Este es uno de aquellos lugares en que el hombre puede encontrarse a sí mismo.  Este silencio posee una integridad de motivo, la paciencia del esfuerzo, y la visión de los fines.

Esos dos días en Nazca pasaron ligeros y profundos para mí.  Durante esa última noche de vigilia, recordé el Camino de los Chilenos y el estrago por sobrevivencia de El Buque Manicero.  Esta alta y silente soledad me extrajo recuerdos y pensamientos que no ocurren en una bulliciosa e iluminada ciudad porque en esa selva de insensible cemento nadie nota tus lágrimas, nadie nota tu tristeza, nadie nota tu dolor; pero todos notan tus errores. 

El lienzo de Nazca y sus celestiales luminarias te escuchan calladamente y te susurran cariñosamente al oído de que el sentido de las cosas no está en las cosas, sino en la actitud que tomamos hacia ellas; y que si miramos en dirección a la luz, no veremos sombras; y que nuestras derrotas son amargas sólo si nos las tragamos, y que cada segundo de nuestras vidas es inmensurablemente valioso.  Recuerde que sólo toma un segundo morir.  

Nuestra aventura llegaba a su final y era hora de regresar a Lima.  Nos tomó varios días conquistar Nazca, una larga y sudorosa jornada como la de Aucanquilcha, y en materia de aproximadamente 30 minutos, el pájaro de brillante metal nos depositó bruscamente en las frías lozas de Jorge Chávez.  Fué como despertar de un inconsciente y brumoso sueño que me llevó zafralmente* a lo más intrínseco y profundo de mi amplexa* e intranquila existencia. 

Gracias Nazca.


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Et sub Glossarium Glossarium – (Cum amore legentibus)
Fitomórficos Que presenta características morfológicas semejantes a los vegetales.
Paroxismo - Exaltación extrema de los sentimientos y pasiones
Geoglifo – Figuras construidas en laderas de cerros o en planicies
Gerontogéneo – De, como, o perteneciente al Viejo Mundo
Zafral – De temporada, temporalmente, transitoriamente
Amplexa – Rodeada, circundada, entrelazada
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Post scriptum et quorumdam suggestionibus pro futurum: Si hay algún tema sobre el cual usted quisiera leer mis traumáticas y ligeramente psicopatísticas opiniones, por favor sugiéralo a: rguajardo@rguajardo.us.

Caveat: Mis opiniones personales pueden resultarle ácidas, demasiado honestas, corrosivas, irreverentes, insultantes, altamente irónicas, acerbas, licenciosas, mordaces y de una causticidad filosófica sin límites conocidos por el ser humano, y quizá no le apetezcan o acomoden intelectualmente; pero es lo que habrá disponible basado en su pedido.  Gracias. 




El Loco