El Paraguas

La palabra "paraguas" proviene del Latín "umbra", lo que significa sombra. También, en Latín se le denominaba “umbella”. En Inglés, -a pesar de que el Inglés no es un lenguaje romancero- la palabra “umbrella” significa “paraguas” en Castellano.

En Castellano le llamamos paraguas; palabra que es auto explicativa pero para la que no tengo la más peregrina idea de quién bautizó este artefacto con este denominativo. Ahora, tanto por su etimología como por su uso principal, no debe confundirse con la sombrilla, también llamada parasol o quitasol.

Las malas lenguas dicen que Paraguay se llama así porque llueve mucho. ¿Será cierto esto? Creo que nó porque en Guaraní (paraguá) que significa "corona de plumas", de ahí el río Paraguay (paraguaí en Guaraní) significa "Río de coronas".

Bueno, basta de etimología e imaginación y concentrémonos en el famoso paraguas.

Para los que viven en otro mundo –los cuales he descubierto que son muchos-, les explico lo que es un paraguas. Un paraguas es una cubierta o toldo plegable sostenido por varillas de madera, bambú o metal, las que generalmente se montan en una pértiga de madera, metal o plástico. Está diseñado para proteger a una persona de la lluvia, y a veces usado para protegerse de la luz solar.

La diferencia entre un paraguas y otro, es el material utilizado para el dosel, sus colores y diseño, y su tamaño. Las marquesinas de los paraguas pueden estar hechas de tela o plástico flexible. Al final, el propósito de cualquier paraguas es protegerlo de la lluvia.

Historia semi-seria y fábula

Se especula que el primer paraguas práctico se inventó hace más de 4.000 años atrás. Hay evidencia de la existencia y uso del paraguas en el arte antiguo y artefactos originarios de Egipto, Asiria, Grecia y China. Estos antiguos paraguas se diseñaron originalmente para proporcionar sombra para protegerse del ardiente sol.

Hay evidencia de que los chinos fueron los primeros en impermeabilizar sus paraguas para usarlos como protección contra la lluvia. Esas sombrillas chinas hechas de papel entonces las barnizaron con cera o laca, para usarlas bajo la lluvia.

Según cuenta una antigua leyenda china, el paraguas fue inventado por Lu Mei (962 - 1021). Esta fué una jovencita china que hizo una apuesta con su hermano mayor para ver cuál de los dos era capaz de construír un objeto para protegerse de la lluvia.

La leyenda cuenta que esta astutísima chinita en solo una noche, construyó una vara de bambú con 32 barras cubiertas con una tela. Con esto le gano la apuesta a su hermano, pero en China, el paraguas ya existía en el siglo XI Antes de la Era Común, y antes de la leyenda. Creo que el nombre del hermano de Lu Mei era Ya Peldió.  ¿Qué cosas, no?

Expansión

El dichoso y práctico inventito del paraguas inició su propagación y dispersión desde China usando la carretera principal de comercio en esa época llamada “la ruta de la seda”. Los primeros países a los que llegó fueron Corea, Japón y Persia.

La Ruta de la Seda fué una ruta comercial histórica que data del siglo II Antes de la Era Común, y que estuvo muy activa hasta el siglo XIV de la Era Común. Esta magnífica ruta se desplegaba desde Asia hasta el Mediterráneo, atravesando China, India, Persia, Arabia, Grecia e Italia.

Se la denominó la Ruta de la Seda debido al acentuado comercio y transporte de la seda que tuvo lugar durante ese período. Esta valiosa y delicada tela se originó en China, país que inicialmente tuvo el monopolio de la producción de seda hasta que se descubrieron, copiaron y difundieron los secretos de su creación. Incluso en ese entonces los chinos se robaban sus secretos hasta entre ellos mismos.

Además de la exquisita seda, la ruta proporcionó la expansión del comercio de otros tejidos, especias, cereales, frutas y verduras, pieles de animales, trabajos en madera y metal, piedras preciosas, otros artículos de valor, y una cacha grande de marihuana. Marco Polo usaba frecuentemente esta ruta en sus viajes, y a menudo paraba en el oasis de Turpan para echar la corta. Esto se sabe porque en una palmera de ese oasis se encontró tallado: “Por aquí pasó Marco Polo “.
¿Qué cosas, no?

El oasis Turpan siempre ha sido un punto de parada popular a lo largo del viaje Este-Oeste a lo largo de la Ruta de la Seda. Ha sido durante mucho tiempo el centro de un oasis fértil surtido con agua proporcionada por el sistema de canales de Karez. Históricamente estuvo ubicado a lo largo de la Ruta de la Seda.

Años más tarde, el paraguas hizo su debut en el Imperio Asirio, Egipto, a la Antigua Grecia y más tarde a las extensas regiones pertenecientes al Imperio Romano. También aquí era empleado solamente como una sombrilla o parasol. En Egipto se empleaba solamente como un objeto ritual cortesano y era seña de alta influencia entre aquellos que desplegaban su paraguas en presencia del faraón. En Grecia solamente lo podían utilizar las mujeres. ¿Qué cosas, no?

Luego, con la caída y desaparición del Imperio Romano, en Roma -la que ahora era Italia- el empleo del umbráculum (quitasol) se siguió empleando retraídamente, pero en el resto de Europa el paraguas cayó prácticamente en el olvido. Durante la Edad Media, el paraguas fué ignorado completamente. El renacimiento del paraguas se vio en el último tercio del siglo XV de la Era Común, apareciendo en París, Francia.

Desarrollos

Más tarde en el siglo XVIII de la Era Común, la primera tienda de venta de paraguas se llamó "James Smith and Sons". Este establecimiento se inauguró y abrió sus puertas en el año 1830, el cual aún se encuentra funcionando y atendiendo público en su localidad de 53 New Oxford Street en Londres, Inglaterra.

Unos años después, en 1852, Samuel Fox inventó el diseño de paraguas con nervaduras de acero. Fox también fundó la "English Steels Company" y afirmó haber inventado el paraguas con nervaduras de acero como una forma de utilizar las existencias de estancias farthingale, las estancias de acero que se utilizan en los corsés de las mujeres.

Samuel Fox (7/6/1815 – 25/2 1887) fué un industrial y negociante británico conocido por discurrir la estructura del paraguas Paragon, y fué el fundador de una usina de aceros en Stocksbridge, un asentamiento parroquial en la ciudad de Sheffield, en South Yorkshire, Inglaterra. Históricamente es parte de West Riding of Yorkshire, y se encuentra ubicada directamente al Este del Distrito Peak.

Después de estos sucesos, los paraguas plegables compactos fueron la gran innovación y metamorfosis técnica que siguió al paraguas y que se incorporó en su fabricación masiva, la que llegó más de un siglo después.

Tiempos modernos

En 1928, Hans Haupt inventó el paraguas de bolsillo. Haupt, un veterano de guerra con una lesión debilitante y le resultaba muy difícil sostener un bastón y un paraguas al mismo tiempo, así que se dedicó a buscar una solución a su problema. En Viena, mientras era un estudiante de escultura, desarrolló un prototipo para un paraguas plegable compacto, para el que solicitó y recibió una patente en Septiembre de 1929.

El nombre original de su paraguas fué "Flirt", y fué manufacturado por una empresa austríaca. En Alemania, los pequeños paraguas plegables de bolsillo eran elaborados por la empresa "Knirps", nombre que se convirtió en sinónimo en el idioma alemán de los pequeños paraguas plegables en general.

En 1969, Bradford E. Phillips, dueño de la fábrica “Totes Incorporated” de Loveland, Ohio, también obtuvo una patente para su "paraguas plegable funcional".

Dato curioso: los paraguas también se han incorporado a sombreros desde el año 1880 y se fabricaron hasta el año 1987.

El paraguas más deportivo es el paraguas de golf. Este viene en uno de los tamaños más grandes de uso común, y suelen medir alrededor de 1.57 metros de ancho, pero pueden variar entre 1.52 y 1.80 metros.

Los paraguas son actualmente un artículo de consumo general con un enorme mercado globalmente. Curiosamente, a partir del año 2008, la mayoría de los paraguas vendidos en todo el planeta se manufacturan dentro de la muralla China. Solo en el establecimiento de Shangyu, un distrito de la ciudad de Shaoxing, a nivel de prefectura en el noreste de la provincia de Zhejiang, China, posee más de 1.000 fábricas de estos benditos paraguas.

En los EE. UU., anualmente se mercantilizan alrededor de 33 millones de paraguas, con un valor aproximado de US$ 348 millones, es decir unos $252.688.100.000 de acuerdo al valor de la UF de fecha 2/5/2021. ¡Esto es una gran cachá de pesos!

A partir de 2008, la Oficina de Patentes de EEUU registró más de 3.000 patentes activas sobre invenciones relacionadas con paraguas.

Hoy

Hoy por hoy, los paraguas en su inmensa variedad de formas, colores y tamaños, se ven por doquier; en las mesas de picnic, en las playas, en las aceras de restaurantes, en estudios de fotografía, decorando cócteles, y entre otros muchos lugares, en las calles lluviosas del planeta defendiéndonos del sol y de la lluvia; y hasta Mary Poppins y El Pingüino de Batman tenían uno.

El omnipotente paraguas es omnipresente por su utilidad, y hemos usado y cargado este magnífico y conveniente accesorio desde tiempos inmemorables. Los recuerdos del paraguas son así de inmemoriales, ya que los seres humanos hemos estado empleando estas circumbirúndicas techumbres portátiles para usufructuar de su noble propósito desde antes de la invención del papel.

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Et sub Glossarium Glossarium – (Cum amore legentibus)

Necesarianismo: Teoría de que las acciones están determinadas por la historia previa; fatalismo.

Obrepción: Buscando obtener un regalo o complacencia mediante premisas falsas.

Oblate: Laico mental que vive en una comunidad religiosa bajo un gobierno modificado.


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Post scriptum et quorumdam suggestionibus pro futurum:

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El Loco